-Hola compadre ¿cómo vas con tus lecturas de coaching?
-Bien Adolfo por cierto algunas personas me han estado preguntado de nuevo que ¿qué es esto del coaching? Y la verdad me cuesta trabajo hacerme entender, si bien apenas lo estoy estudiando, no encuentro las palabras.
-Te entiendo compadre a mí me pasa seguido y creo que lo más sencillo es lo mejor, a veces cuando alguien me pregunta qué es el Coaching y pretende que con dos palabras le explique acerca del arte y la magia de esta disciplina, pienso que lo que diga, nunca será suficiente para transmitirle lo que yo he vivido como Coach.
-Y entonces ¿qué haces?
-Les platico mi historia.
-Cuéntame otra vez cómo empezaste.
-Recuerdo cuando comencé allá por el año 2010, y me doy cuenta de que en ese momento nada de lo que me dijeran podría haberme hecho, siquiera, percibir su grandeza y el lugar al que yo podía acceder.
-Mira si todo lo que me has platicado, me lo hubiera dicho alguien a quien no le tengo la confianza que a ti hubiera pensado que todo era simplemente una exageración de alguien que estaba tratando de venderme un curso.
-Compadre por eso cuando quiero que alguien entienda la posibilidad de que ésta podría ser la carrera de su vida solo le cuento mi experiencia y le pregunto si está interesado en vivir una experiencia semejante.
-Me consta que antes de que te metieras en esto, estabas seguro de que tu carrera de Ingeniería Química te hacía sentir que eras más que los otros y que los fracasos que tuviste eran cosa de la mala suerte o el destino, que simplemente te había tocado vivir esa vida, y que nunca la podrías cambiar.
-Así es para que te digo que no, vivía en la resignación, creía que los sueños eran solo para esas personas que vivían sin tener los pies en la tierra y que los realistas como yo nos teníamos que ocupar de cosas más concretas.
– ¿Tuviste días que transcurrían de una forma rutinaria, monótona e insatisfacción?
-Vaya que los tuve, hasta que un día apareció un Coach en mi vida y desperté de un letargo que tenía por años. Pude ver que había una vida nueva, a la que yo podía acceder. Me di cuenta de que yo tenía alas para volar hacia mis sueños y mi Coach fue como el viento que yo necesitaba bajo mis alas
-Y fue cuando empezaron los cambios en tu vida.
-Me conoces compadre, primero cambié mi forma de ver las cosas, y empecé a cuestionar muchas de mis certezas lo cual me abrió a nuevas posibilidades de acción. Después mejoré mi comunicación interna, aprendí a conocerme mejor, a saber qué era lo que yo quería, a desafiarme para establecer y conseguir nueva metas.
– ¿Qué otra cosa conseguiste Adolfo?
-También mejoré mi comunicación con los demás y todas mis relaciones comenzaron a renovarse, con mi pareja, mis hijos, mi madre, en fin, con muchos, hasta contigo compadre.
-Nunca me he quejado de nuestra amistad, pero definitivamente se ha fortalecido, además con estas pláticas yo también he comenzado a soñar con cosas que antes veía como imposibles y las he convertido, paso a paso, en realidad.
-También veo esos cambios en ti, entonces te podrás imaginar que después de haber gozado de esta transformación en mi persona, decidí convertirme en Coach para poder transmitir esto a la mayor cantidad posible de personas.
– ¿Si te ha servido a ti, le puede funcionar a otros?
-Tal vez no a todos, pero seguro si a muchos.
